Como alumno de Formación Profesional en el último mes del curso académico, es normal que experimente una gran variedad de pensamientos y emociones. Por un lado, es posible que sienta alivio al saber que el final del curso está cerca y que pronto tendrá un merecido descanso. Sin embargo, también puede sentir cierta ansiedad y presión debido a las tareas y exámenes finales que se acercan.
Es probable que en este momento se sienta orgulloso de todo lo que ha logrado durante el curso. Ha adquirido nuevas habilidades y conocimientos, ha trabajado duro en proyectos y tareas, y ha superado desafíos y obstáculos. Es posible que se sienta satisfecho con su progreso y con los logros que ha obtenido.
No obstante, es normal que también sienta cierta preocupación por el futuro. Puede estar preguntándose si podrá encontrar trabajo en su campo de estudio, si tendrá éxito en su carrera y si debería continuar con sus estudios. Estas inquietudes pueden ser abrumadoras, pero son importantes para reflexionar y tomar decisiones informadas.
Además, es posible que sienta nostalgia por los amigos y compañeros que ha conocido durante el curso. Si este es su último año en la escuela, puede sentir tristeza por dejar atrás estas relaciones y preocupación por mantenerlas en el futuro.
En resumen, como estudiante de Formación Profesional en el último mes del curso académico, es normal sentir una gran variedad de emociones y pensamientos. Es importante tomarse el tiempo para reflexionar sobre todo lo que ha aprendido y experimentado durante el curso, para poder tomar decisiones informadas acerca de su futuro profesional y personal.